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lunes, 24 de mayo de 2010

La Iglesia depravada. De Pedro a Cajasur

Cada día estoy más convencido de que los pelotazos urbanísticos se los inventó Dios y su hombre de paja le hizo un buen trabajo. Lo dice la Biblia, en Mateo 16: 13-19, “Tu eres Pedro, sobre ti edificaré mi Iglesia”. Como es sabido, el origen de Pedro es latino, petrus, que diría mi sita Esperanza, que fuera mi profa de latín. Las piedras evolucionaron en ladrillos. Por otra parte, Petrus tiene su version catalana popular: Peret, como puedes ver aquí. Pero esa es otra historia.

Pero cada vez más, los ladrillazos de la Iglesia hacen agua. Algunos escándalos fueron bien sonados. No hace mucho recordamos en nuestro país al diácono de Valladolid y sus estafas en el caso Gescartera (joé que flacos de memoria andamos).

Mucho más espectacular fue el petardazo del Banco Ambrosiano, cuyo accionista mayoritario era el Vaticano. El Vaticano fue acusado de concentrar fondos secretos de los Estados Unidos al sindicato polaco Solidaridad y a los contras en Nicaragua a través del Banco Ambrosiano. El Padrino III toca este asunto, que acaba con el asesinato del Juan Pablo I.

Después vendría el papa polaco, Juan Pablo II, que su beatificación de urgencia anda paralizada por su amistad con uno de los mayors delincuentes de la historia, el inventor de los legionarios de Cristo: pederastra, drogadicto y padre de un porrón de niños con dos o tres mujeres, que hablo de memoria. Secta que, por cierto da mucho de que hablar en sus relaciones con nuestro PP. Aquí puedes cotillear cotilleos más o menos serios.

En nuestro país, muchos de los grandes pelotazos urbanísticos tienen como protagonistas a los herederos y herederas (que hay mucha marquesona) del franquismo. Y la Iglesia católica es la más directa heredera del franquismo, junto con algunos jueces (ves, juezas franquistas hay pocas).

Este fin de semana, la Iglesia católica y los pelotazos han vuelto a tomar las primeras páginas de los periódicos. El Banco de España ha expedientado a Cajasur por exceso de ladrillo. Según la prensa, durante el pasado año, en plena crisis y después de conocidos los excesos, cuando no estafas inmobiliarias, la Caja cordobesa inyectaba decenas de millones de euros en el negocio del ladrillo, o de la piedra, que diríamos hace dos mil años. La cuestión es que Cajasur estaba manejada por la Iglesia, su presidente, Santiago Gómez Sierra, sacerdote católico y dean de la catedral de Córdoba.

Cajasur había sido apremiada por el Banco de España para que se fusionara con Unicaja. Todo estaba a punto y, de repente, los curas de Cajasur dan marcha atrás y la entidad es intervenida por el Banco de España. Como no será la cosa que el ex vice presidente (del PP) y el ex consejero del PSOE echan toda la culpa de la intervención a la Iglesia.

El argumentario de urgencia del PSOE parece que dice que hay que llamar “valiente” al presidente Zapatero, que ya dejó de ser ZP, por las medidas de ajuste que ha decretado y que afectan fundamentalmente a empleados y empleadas públicas, y a pensionistas. Podría desgranar un puñado de auténticas medidas valientes, una de ellas, por ejemplo, romper los concordatos (o el inconstitucional Concordato) que hacen que de nuestros impuestos tengamos que pagar profesores de religion católica en un estado aconfesional, o acabar con la crucecita del IRPF. No digo ya hacer inventario de los bienes inmuebles de la Iglesia, centros de depravación en muchos casos, y nacionalizarlos, que tampoco estaría mal.

La Iglesia católica está edificada sobre el ladrillo. El ladrillo nos ha metido en esta crisis loca. Busquemos medidas para acabar con el ladrillo. No preguntemos a Aristóteles que su lógica puede ser aplastante.

Aquí os pongo un poquito de El padrino III. El Vaticano condecorando a su colega Corleone:


4 comentarios:

  1. Nada tiene que ver ésta iglesia jerárquica con el que dicen representar..siempre han estado a lado de los poderosos.:-( ..Por eso ¿ qué más les dá bendecir a gansters ?

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  2. Muy bien, don Alfonso !!

    Abrazos del Pepe Molleda

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  3. Muy bien, don Aalfonso !!

    Un abrazo del Pepe Molleda

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