Blog de Alfonso Roldán Panadero

Autorretrato
Mi foto
En las fronteras hay vida y tuve la suerte de nacer en la frontera que une el verano y el otoño, un 22 de septiembre, casi 23 de un cercano 1965. En la infancia me planteé ser torero, bombero (no bombero torero), futbolista (porque implicaba hacer muchas carreras), cura (porque se dedicaban a vagar por la vida y no sabía lo de la castidad...) Luego, me planteé ser detective privado, pero en realidad lo que me gustaba era ser actor. Por todo ello, acabé haciéndome periodista. Y ahí ando, juntando palabras. Eso sí, perplejo por la evolución o involución de esta profesión. Alfonso Mauricio Roldán Panadero

sábado, 23 de febrero de 2013

No, la película de la campaña que derrocó a Pinochet


¡Caray! , a pesar de haberse estrenado hace bien poco y estar nominada a un Óscar (primera película chilena nominada) no la proyectan en muchas salas. No creo que haya que buscarle tres pies al gato, pero es una peli como para que tuviera más salida. Rezuma entusiasmo por vencer al dictador Pinochet, pero fundamentalmente está basada en la alegría. Entusiasmo, color, alegría y humor son los condimentos en que se basó la campaña publicitaria que consiguió derrocar a Pinochet (la franja horaria del NO, frente a la del SI) en aquel plebiscito convocado por el propio régimen en 1988.

Una campaña que supo poner en positivo un “no”; que tuvo que vencer las resistencias de los propios defensores del no, más proclives a destacar el negativo y gris presente y pasado del régimen dictatorial; imposible de olvidar. Una campaña, que ya en marcha, sufrió censura, persecución y amenazas contra sus creadores. Aunque es cierto que no se trataba de los duros primeros tiempos del golpe, ya que, como recuerdan al principio de la cinta, igual que los gringos estuvieron detrás del golpe contra Allende, también estaban a favor del “no” en el plebiscito. Esos tiempos fueron narrados en 1982 por Costa-Gravas en Missing, que fue nominada a cuatro Óscar y logró el de mejor guión adaptado.

Evidentemente la campaña de No es mucho menos costosa y más honesta que la que se desarrolla en La cortina de humo, pero sí existe ese pequeño trasfondo de “lo profesional”. En No, los trabajadores de una agencia publicitaria trabajan por el no, y los jefes, por el sí. Es la lucha de clases llevada a la publicidad, y al final, existe cierta caballerosidad, cierto respeto por el trabajo bien hecho. Es interesante la relación entre el jefe y el personaje protagonista interpretado por Gael García.

Aunque en un principio aseguren que ganar el plebiscito sería un milagro, que la campaña se da por perdida desde el principio, en humilde opinión, una campaña bien hecha puede despertar indecisos o aportar un 10 por ciento, pero las campañas no ganan por sí solas. Como diría Lenin, deben darse las condiciones objetivas, y si el gringo está contigo…, pues mejor.

A mí me ha gustado la película más allá de que se abuse un poco de los primeros planos de los bellos ojos de Gael García. Me ha gustado porque es un falso documental de la trastienda de un intenso momento político. Me ha gustado porque hay que serguir diciendo no en positivo y con alegría, defendiendo la alegría, que decía Benedetti.



martes, 19 de febrero de 2013

Guillermo Rayo Pro-testa el 27F

Una foto de Fran Lorente. Guillermo Rayo es el de atrás, claro, sin canas.
Andamos saturados de manifas, concentraciones y concentraciones. La más gorda de los próximos días será el 23F, donde confluirán todas las mareas en un tsunami, en la madrileña plaza de Neptuno, a las seis de la tarde. El 27F también está prevista una concentración en Sol contra la corrupción. Y esa misma noche habrá Asamblea Musical Constituyente en la Sala Galileo Galilei, con Guillermo Rayo. Allí nos presentará PRO-TESTA su última creación. Guillermo ya se pasó por este blog como podéis recordar aquí.

PRO-TESTA es un DISCO LEY en el que, a través de la estructura de una ley se introducen canciones en diferentes estilos (jazz, swing, chachachá, reggae…).
El contenido de la ley versa sobre demandas sociales justas pero poco probables. “De cosas imposibles, porque de lo posible se sabe demasiado”. Todo ello, claro, tratado con humor y amor.

Las letras de las canciones complementan esas demandas siempre desde una óptica positiva utilizando la música junto a la inteligencia, la ironía y el lenguaje como “armas de construcción masiva”.

En directo, con una formación acústica, se presenta como una asamblea plenaria para aprobar dicha Proposición de Ley y sus antecedentes. Con una visión siempre humanista, nunca partidista…

Sin llegar a ser una pieza teatral, es algo más que un buen concierto.

Guillermo, amigo de sus amigos es músico y actor andaluz con experiencia en cine, teatro y televisión. Ha grabado cinco discos (1989-2012). Es compositor, presentador, actor, guionista, payaso, reportero… siempre aprendiz. Sus espectáculos no son conciertos al uso y sus canciones no son de amor, pero hay amor en todas.

El Disco-Ley consta de, por ejemplo:

Título Preliminar
Introducción jazzística a la Ley Pro-testa. Incluye la Exposición de motivos y los artículos 1 y 2 del Título I: “Del Mundo y sus ciudadanos”.

El Artista Mileurista
Art. 3: Swing dedicado a la especulación inmobiliaria y sus consecuencias sociales. Todos somos artistas, porque sobrevivir en estas circunstancias (económico-socio-político financieras) es, por lo menos, de equilibrista.

Hotel 5 Estrellas
Art. 5: Soul dedicado a todas las madres que han recibido de nuevo a sus hijos y nietos en sus casas como consecuencia del desempleo y la precariedad laboral. Ellas son las verdaderas heroínas de esta lucha. Habría que subvencionarlas, no reducirles la pensión.

“NO woman, no cry”
Madre Audiencia
Art.6: Canción pop dedicada a la excesiva dependencia a la televisión. Hasta el punto de marcar los principios morales de los individuos y, por tanto, de la sociedad. La confusión de madres.

Tó el mundo es bueno
Disposición final: Reggae sobre la esperanza en que: el ciudadano es bueno en esencia; el político está para ayudarnos; el policía está para protegernos; los profesores están para enseñarnos… y así sucesivamente (puede jugar en casa si quiere).... Todos somos buena gente.

Merece la pena apuntarlo en la agenda y acudir el 27 de febrero en la Sala Galileo Galilei.

Todo sobre Guillermo Rayo aquí.

Y en este video. En acción:


domingo, 17 de febrero de 2013

Hitchcock, la película y Alma, la protagonista


Aprovecho los instantes previos a la entrega de los Premios Goya, aprovecho ese suspense, para comentar sobre el maestro del suspense. O mejor, sobre la película que aborda el rodaje de su más exitosa cinta: Psicosis. Y es que anda de moda escudriñar con cierta meticulosidad en partes de la vida de personajes. Ya pasó con Marilyn, y recientemente con Lincoln.

A pesar de que pensaba que me iba a aburrir, tenía yo que acudir a la cita con el maestro. Con ése con quien en la infancia…, o adolescencia, echaba el rato frente a la tele disfrutando de esa serie tan maravillosa ¡en blanco y negro!: Alfred Hitchcock presenta… Y es que…, somos lo que comemos y lo que vimos de pequeños en la tele.

Después de Con la muerte en los talones, Hitchcock se tira a la piscina y decide rodar sin ayudas externas, Psicosis. Con la muerte en los talones llevó al director a la cresta de la ola de su carrera.

Así que nuestro protagonista se encuentra con 60 años, en el cenit del éxito y lleno de presiones para que no haga locuras. Con todo mi respeto para la juventud, esta peli demuestra que la experiencia es bastante importante y que con 60 años quizá se puedan hacer cosas tan interesantes, e incluso frescas y novedosas, como con 25 ó 35. Con el valor añadido de eso, la experiencia, las espuelas que va colocando la vida.

En la película vemos esa parte oscura del maestro: sus obsesiones, sus ansiedades, sus rarezas… Todo ello domesticado por su mujer, Alma . Queda claro en el filme, no sólo que detrás de un gran hombre hay una gran mujer, sino que si no hubiera habido Alma, no habría habido Hitchcock. Trabajadora infatigable. Es la única capaz de suplir al director ante una ausencia. La mujer nunca es protagonista. Cuando es protagonista tiene que repartir protagonismos con el macho o los machos alfa del equipo o de la tribu, aunque los machos no hayan hecho nada. Lo veo muchas veces. La mujer es el florero y el hombre es la marca. Y…, bueno, volviendo…También es interesante el jaleillo sentimental que se traen durante el rodaje Alma y Alfred.

En definitiva, creo que merece la pena esta película si tienes curiosidad por el cine, sin necesidad ser un gran cinéfilo, o cinéfila. Los trucos, las peleas con la censura… Es un gran making off de Psicosis, y vemos cómo consiguió rodar esta escena, la de la ducha para la historia.

Por cierto, Hitchcock no logró nunca un Óscar y mira que dio dinero a Hollywood…

sábado, 16 de febrero de 2013

Lincoln, la película. El fin y los medios


“La causa más justa se ganó impulsando la corrupción política y con el consentimiento del hombre más puro que he conocido”. La frase la pronunciaba el radical Thaddeus Stevens, interpretado magistralmente por Tommy Lee Jones en la película Lincoln, de Steven Spielberg. “La causa más justa” era la aprobación de la XIII enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, que suponía la abolición de la esclavitud poco antes de que finalizara la Guerra de Secesión. “El hombre más puro” es, evidentemente, Lincoln.

Hace ya días que vi Lincoln y todavía está horneándose en mi cabeza. La maquiavélica frase de Stevens, pronunciada con cierta retranca una vez que fue aprobada la enmienda, es resumen de lo que es la cinta. Esto es, la dura lucha política, el trabajo de fontanería, las corruptelas necesarias para alcanzar un fin tan noble y loable como la abolición de la esclavitud. Esto es volvemos al asunto de principios del siglo XVI: ¿El fin justifica los medios?

No es por tanto esta película un biopic sobre el presidente estadounidense, sino que se reduce al periodo de la aprobación de la enmienda sobre la abolición de la esclavitud, eso sí, con Lincoln como protagonista. Un Lincoln político por los cuatro costados: icono del noble arte de la política es capaz de bajar a la corruptela; populista, compasivo, meditabundo. Es este Lincoln un tipo que medita, que tiene paciencia porque el tiempo pone todo en su sitio, contador de anécdotas en los momentos más tensos, con fino sentido del humor pero también con accesos de ira.

Y también hay lugar para ver al Lincoln padre y esposo., con su humana vertiente de padre que no quiere que su hijo se aliste, fundamentalmente arrastrado por su esposa. Una primera dama que interviene mucho en política, quizá más de lo que en realidad fue, ya que, por ejemplo, su permanente presencia en los debates de la enmienda son impensables.

Vemos a un Lincoln que llega al abolicionismo porque es un simple hecho de justicia, ya que asegura no conocer al “pueblo” negro. Circunstancia que sí se daba en el mencionado Thaddeus Stevens, un hombre de origen humilde enfrentado siempre a la aristocracia y amante de su ama de llaves negra. Un visceral político que en un momento dado tiene que atemperar su desbordante energía para eso, para “hacer política”, que los grises existen. Pero su irrefrenable retórica hace que espete a su adversario político tras una pequeña bajada de pantalones: “Incluso un indigno y un mezquino como tú debería ser tratado con igualdad ante la ley”.

Y vemos a un Lincoln muy afectado por el río de sangre que supuso la guerra, visitando Petersburg después de la batalla en compañía del legendario general Grant, su cómplice brazo armado.

Es una película que se va creciendo. Densa al principio empieza a coger tono para acabar implicado cuando los congresistas entonan el Battle cry of freeedom. Un 1 de febrero de 1865 arrancó quizá la ley más importante del siglo XIX.

jueves, 14 de febrero de 2013

Naranjo cambia de vía pero no de la estación CCOO

Naranjo en una foto de Fran Lorente

Antes de venir a CCOO de Madrid estuvo en el Sindicato Ferroviario, allá por 1976. También anduvo una temporada corta en la Federación de Comunicación y Transportes. Fue a raíz de una serie de cambios que hubo en la Unión Regional de Madrid que el secretario general de entonces, Juan Moreno, le propuso el puesto y se vino. De esto hace más de veinticinco años. Evidentemente no es esta una charla al uso, que Naranjo es parte indisociable de las Comisiones Obreras de Madrid. Y no puede ser una charla al uso porque entrevistado y entrevistador, entre unas cosas y otras, se conocen desde hace más de veinticinco años


P: Has “sufrido” a tres secretarios generales, ¿qué has aprendido de ellos?
R: De todos aprendí mucho. De Juan Moreno lo que más me ha quedado era lo necesarias que eran las relaciones internacionales. En ese periodo es en el que más relaciones internacionales hemos tenido con otras ciudades y regiones europeas. De Rodolfo Benito destaco el método, en el sentido de no tirarse a la piscina sin agua. O sea, que antes de tomar decisiones hay que dar una vuelta a los asuntos. Con Javier López he aprendido la capacidad de “dejar hacer”, de delegar para que cada cual desarrolle sus capacidades, ya sean las secretarías, las comarcas o las federaciones. También destacaría su capacidad de aunar voluntades y encontrar consensos. Pero bueno…, la persona que con diferencia más huella me ha dejado ha sido Pilar Blanco, una compañera del metal, sindicalista y periodista.

P: Fueron muchos años desde el principio de la Secretaría de Comunicación.
R: Conviví con ella muchos años en el gabinete. Aparte de compañera fue una gran amiga. Tras su muerte, a propuesta de Javier López se instauraron los premios Pilar Blanco a la comunicación sociolaboral, que entregamos cada año.

P: Has aprendido, pero también habrás enseñado algo…
R: Creo que he aprendido más que he enseñado. Sí he insistido mucho en que lo que es noticia hoy, mañana irá al cesto de los papeles. También he intentado que todas las federaciones, que todas las comarcas, que las secciones sindicales, inviertan una parte de su tiempo a la comunicación. Por mucho que se haga a favor de los trabajadores, si no se da a conocer es como si no existiera.

P: Testigo y protagonista de la evolución tecnológica. Desde llevar en sobre a las redacciones los comunicados hasta las redes sociales.
R: Cuando comencé, aparte de la capacidad de las personas, también se destacaban “los elementos técnicos”, o sea, si se tenía o no automóvil porque los comunicados había que elaborarlos y también distribuirlos. La evolución ha sido grande y creo que sí he contribuido a ello. En su día editamos un Manual de información sociolaboral que se está utilizando en toda España. Acabamos de sacar una cuarta edición puesta al día con el uso de nuevas tecnologías y redes sociales.

P: O sea que te has creído lo de las redes sociales…
R: Estamos condenados a convivir con las redes sociales si olvidar que la base fundamental del sindicalismo está en el bis a bis, en el mano a mano y en las asambleas de base. Hay que seguir empujando en las redes sin olvidar que hay que estar en la calle, a pie de tajo, en las asambleas.

P: Con la Secretaría de Mujer también ha habido un trabajo conjunto que viene a suponer una evolución en el sindicato…
R: La incorporación de la mujer es uno de los grandes cambios que se están acometiendo en el sindicato. He llegado a la conclusión que desde el punto de vista individual las personas son iguales, pero como colectivo creo que las mujeres están por encima de los hombres.

P: ¿Cuáles son los momentos más duros que has vivido en esta Secretaría?
R: El peor momento con diferencia fue el atentado del 11-M. El más cruel atentado que ha vivido Madrid y en el que, además, dos personas cercanas fueron asesinadas: el sobrino de Rodolfo Benito y el hijo de Pilar Manjón. Nunca olvidaré la noche del 11-M en el Pabellón del Campo de las Naciones con los pasillos repletos de personas esperando que les comunicaran la terrible noticia.

P: ¿Y a nivel interno?
R: Han sido duras todas las convocatorias de huelgas generales. El problema de la huelga general no es convocarla, sino hacerla. Otro momento complicado en el interno fue el relevo de Antonio Gutiérrez por Fidalgo, fue complicado llegar a consensos, pero con el tiempo se cerraron las heridas. También fue duro, y dedicamos mucho tiempo al conflicto de Sintel. Fueron seis meses muy intensos de acampada en el Paseo de la Castellana.

P: ¿Y los momentos más bonitos?
R: Cada Congreso finalizado es el momento álgido. Cada Congreso es un mundo, pero también una gran alegría. De todas formas, es cada vez que paso junto a la estatua conmemorativa de los abogados de Atocha, El Abrazo de Genovés cuando siento la emoción de que al menos un trocito es mío por el esfuerzo que unos y otros hemos hecho para que se erigiera aquí.

P: ¿No has tenido tiempo para el aburrimiento en estos veinticinco años?
R: En una Secretaría de Comunicación siempre ocurren cosas nuevas. La comunicación no es algo estático, está en evolución constante. Por ejemplo, la propia prensa sindical. Antes existía Unidad Obrera, que se distribuía a todos los delegados. El paso posterior fue el Madrid Sindical y llegamos a toda la afiliación. Como bien sabes, cada número es una aventura nueva. El primer número vio la luz en 1997, en blanco y negro, y luego ha ido evolucionando. Me siento muy orgulloso de su existencia. Un periódico, que según las encuestas, es el único medio de la organización que recibe el 90 por ciento de la afiliación, ya que el resto está superinformado a través de la web, de su federación, de su comarca. Madrid Sindical fue un reto del que estoy muy orgulloso de haber consolidado y que espero que se mantenga durante décadas.

P: ¿Qué dirías desde la experiencia a los nuevos cuadros?
R: Creo que no se debe constreñir el trabajo de las personas. En nuestro caso, hay que dejar a los periodistas a que hagan su trabajo con suficiente autonomía para desarrollar sus capacidades y talentos, que los hay. Es un error estar detrás de personas con capacidad, independientemente de los necesarios debates y reuniones.

P: ¿Y tu futuro?
R: Algo que me da muchas satisfacciones es todo lo relacionado con la memoria de los Abogados de Atocha y me siento muy orgulloso de que el patronato de la Fundación Abogados de Atocha me propusiera para la vicepresidencia. Uno de los grandes problemas de este país es la falta de memoria histórica y estoy encantado de contribuir a recuperarla y mantenerla. Es un reto al tiempo que una labor muy grata.

Tomando nota.

¿Juan Moreno?: “Relaciones Internacionales”
¿Rodolfo Benito?: “El método”
¿Javier López?: “Consenso y dejar hacer”
 “La persona que con diferencia más huella me ha dejado ha sido Pilar Blanco”
“Estamos condenados a convivir con las redes sociales”
“Es un error estar detrás de personas con capacidad”
“Como colectivo creo que las mujeres están por encima de los hombres”

miércoles, 13 de febrero de 2013

En el Día de la radio: felicidades, radio


Recuerdo aquellos días de gripe, de anginas o dolor de tripas un poco sobreactuados para evitar un día de escuela. Esas mañanas en la cama, rodeado de tebeos, con la voz de Luis del Olmo en Radio Nacional mientras mi madre se afanaba con la casa. Recuerdo esa sintonía tomada de Crónicas de un pueblo y un largo programa matinal. Y recuerdo a mí madre conversando con las ondas. Un ritmo trepidante sólo interrumpido a las doce de la mañana: “Es la hora de El Ángelus. El ángel del Señor anunció a María”…

Recuerdo los domingos a mí padre madrugando con la radio, con Caravana de amigos, creo recordar. Y recuerdo a mí padre trasnochando intentando coger La Pirenaica. Siempre obsesionado por comprar radios con Onda Media, Onda Larga, FM y todas las ondas del mundo para ver si pillaba algo.

Y recuerdo tardes veraniegas de aburrimiento infantil vespertino animadas por radio novelas y por teatro en la radio donde la imaginación volaba.

Luego fue pasando el tiempo y recuerdo cómo se metió en mi vida Joaquín Luqui, J.L.  en FM, “un besito para ellas y un abrazo para ellos” con Los 40 principales de la Ser.

La radio siempre estaba ahí cuando la necesitaba. Incluso aquel espantoso 23 de Febrero que me pilló esquiando en Sierra Nevada, en días que no existía internet ni los teléfonos móviles.

Y recuerdo alternar eternas tardes de estudio con Ándres Aberasturi en Radio Nacional. Con sus hipocondrías y su amor por Leonard Cohen, que me contagió. Luego a Aberasturi lo encontré alguna imaginaria de cocheras en la mili. Incluso había mili cuando yo era joven. En esos meses fui conductor y la radio fue compañera en largas horas de espera. Si no perdí el tiempo en la mili, fue gracias a la radio.

También recuerdo cuando apareció Javier Sardá y el señor Casamayor, ese viejito que imaginábamos con su batín y sus zapatillas de cuadros de andar por casa. Tanto le seguí que me llevo de una emisora a otra.

Recuerdo noches en la cama escuchando La Verbena de la Moncloa. Y recuerdo a Gomaespuma y su CarmenOpausia. Y recuerdo los Clásicos populares que oía mi padre y terminé dándome cuenta de que los oía yo también. Que al abandonar el nido los sintonizaba cuando podía.

Vivía el “gooooooooooool en San Mamés” con Carrusel Deportivo.

Cada cita electoral, la torres gemelas, el 11M con Iñaki Gabilondo... Recuerdo que en las mañanas, antes de la guardería, mi hija tenía dos voces: la mía y la del maestro Gabilondo.

¡Caray! No habría sido posible la vida sin la radio. La radio, ese ruidillo que a veces se escucha y a veces se oye sigue estando ahí. Ahora por internet y a la hora que uno quiera, como los proyectos de Javier Manzano.

Gracias radio por no dejarme solo. Felicidades porque hoy ha sido tu día y enhorabuena, que eres un medio viejo y con futuro, a pesar de ruidosos tertulianos y coros mediátios de bienpagados.

Quizá sea algo previsible este gran tema, pero..., es un gran tema: