"No entiende el que no quiere entender y la gente que ha venido aquí, viene porque entiende". No, no es lema de un congreso de gays o lesbianas. Es la rotunda afirmación final de Fidalgo para presentar a Sosa Wagner como cabeza de lista a las elecciones al Palamento Europeo por el UPyD de Rosa Díez.
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Como era de prever, y como deja claro Fidalgo, una reunión de gente con un coeficiente intelectual muy superior al de la media de la ciudadanía, por mucho que usen el concepto "ciudadanos", igual que hace el PP con el término "popular". Hombre, lo de IU, con "izquierda unida" es distinto. Es un quiero y no puedo, o quiero y no sé.
En fin, el "estreno de la nueva y estimulante voz" de Fidalgo se puede escuchar en el video, pero yo destacaría (de la parte inteligible del discurso), que considere a Rosa Díez y su trouppe como "el comité central de la resistencia".
También en Móstoles (y dale con Móstoles) ha tenido una nueva incorporación el partido de Fidalgo o de Rosa Díez: Ángela Álvarez, que fuera concejala de IU en su día. Y bueno, en esta ciudad ya tienen nueva sede, que parece que andan bien las finanzas…
Y con estas, hoy hice un plan parecido al de Francino: unas exquisitas tapas en La Isleta, en Doctor Castelo, y un Cine Renoir Retiro en buena compañía. Nuestra película, Los abrazos rotos.
Y yo que di dos cabezadas. Y la película que no me llegaba ni al alma, ni al hígado, ni al corazón, ni al cerebro. Que a pesar de tener un coeficiente de ciudadano medio, que no superior de ciudadano de partido, iba previendo lo que iba ocurriendo. Incluso me ocurrió algo espantoso. Miré la hora. Cuando faltaban más de 60 minutos de metraje, miré la hora en la penumbra porque la cosa se alargaba, y algunas no cuadraban.
Al final renace Almodóvar en una caricatura de sus viejas películas. Y al final una conclusión: la importancia que tiene montar bien una película. Incluso, la importancia que tiene montar mal una buena película, porque como dice Mateo, el personaje protagonista: "Una película hay que acabarla, aunque sea a ciegas".
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Como era de prever, y como deja claro Fidalgo, una reunión de gente con un coeficiente intelectual muy superior al de la media de la ciudadanía, por mucho que usen el concepto "ciudadanos", igual que hace el PP con el término "popular". Hombre, lo de IU, con "izquierda unida" es distinto. Es un quiero y no puedo, o quiero y no sé.
En fin, el "estreno de la nueva y estimulante voz" de Fidalgo se puede escuchar en el video, pero yo destacaría (de la parte inteligible del discurso), que considere a Rosa Díez y su trouppe como "el comité central de la resistencia".
También en Móstoles (y dale con Móstoles) ha tenido una nueva incorporación el partido de Fidalgo o de Rosa Díez: Ángela Álvarez, que fuera concejala de IU en su día. Y bueno, en esta ciudad ya tienen nueva sede, que parece que andan bien las finanzas…
Y con estas, hoy hice un plan parecido al de Francino: unas exquisitas tapas en La Isleta, en Doctor Castelo, y un Cine Renoir Retiro en buena compañía. Nuestra película, Los abrazos rotos.Y yo que di dos cabezadas. Y la película que no me llegaba ni al alma, ni al hígado, ni al corazón, ni al cerebro. Que a pesar de tener un coeficiente de ciudadano medio, que no superior de ciudadano de partido, iba previendo lo que iba ocurriendo. Incluso me ocurrió algo espantoso. Miré la hora. Cuando faltaban más de 60 minutos de metraje, miré la hora en la penumbra porque la cosa se alargaba, y algunas no cuadraban.
Al final renace Almodóvar en una caricatura de sus viejas películas. Y al final una conclusión: la importancia que tiene montar bien una película. Incluso, la importancia que tiene montar mal una buena película, porque como dice Mateo, el personaje protagonista: "Una película hay que acabarla, aunque sea a ciegas".
