Blog de Alfonso Roldán Panadero

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En las fronteras hay vida y tuve la suerte de nacer en la frontera que une el verano y el otoño, un 22 de septiembre, casi 23 de un cercano 1965. En la infancia me planteé ser torero, bombero (no bombero torero), futbolista (porque implicaba hacer muchas carreras), cura (porque se dedicaban a vagar por la vida y no sabía lo de la castidad...) Luego, me planteé ser detective privado, pero en realidad lo que me gustaba era ser actor. Por todo ello, acabé haciéndome periodista. Y ahí ando, juntando palabras. Eso sí, perplejo por la evolución o involución de esta profesión. Alfonso Mauricio Roldán Panadero

martes, 8 de enero de 2013

Isabel de Ocampo, nominada al Goya, presidenta de CIMA



Isabel de Ocampo fotografiada por Fran Lorente .
Es directora de cine, presidenta de CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audiovisuales) y acaba de ser nominada por Evelyn al Goya a la dirección novel . Isabel de Ocampo es tan elocuente con su hablar como con su mirada clara. Y es que habla desde las entrañas cuando critica el mundo que envuelve la prostitución y la trata; y habla con ojos transparentes, balconada de lujo de su alma. Mujer, joven, trabajadora y sobradamente preparada, ha probado la amargura del fracaso y las mieles del éxito. Además de nuevos proyectos cinematográficos, está empeñada en cambiar el mundo para que sea más igualitario, para que las mujeres ocupen el lugar que merecen, también, en el cine.

Tanto Miente, el corto con el que logró el Goya, como su nominado Evelyn, su primer largometraje, versan sobre la prostitución. El corto, asegura,  la dejó con interrogantes respecto a este mundo y el de la trata.

“La prostitución es un tema muy poco tratado en el cine, porque cuando se aborda, se hace desde unas perspectivas muy frívolas y muy intrascendentes, perpetuando un arquetipo alegre al modo Pretty Woman, que nada tiene que ver con la realidad. He estado tres años investigando sobre el mundo de la prostitución para elaborar el guión. Me tuve que dejar en casa todos los prejuicios, incluidas aquellas partes con las que estoy moral y radicalmente en contra. Pero así tenía que hacerlo para escuchar a todas las partes”, explica de Ocampo entre sorbo y sorbo de café.

No se yo si anda la directora de CIMA un poco obsesionada con este asunto de la prostitución…

Asegura contundente que no, que lo que curre es que en su búsqueda  de identidad femenina, como les ocurre a todos los artistas, lo que le interesa es saber quién es, de dónde viene y a dónde va y…: “se hacen descuentos para grupos”, que diría Woody Allen”. En esta búsqueda de saber si somos nosotros mismos o productos de la cultura, ha llegado a una conclusión evidente: “las mujeres somos un producto cultural”.

Explica que el asunto es tan brutal como que, no hace tanto, la mujer no tenía condición de ser humano. “Los científicos de la época incluso demostraban que éramos inferiores en la escala evolutiva”.

Ahora soy yo quien da sorbos al café, el mío descafeinado, y pregunta qué tiene que ver una cosa con otra. Y nuestra directora de cine lo explica:

- “Llegué a la conclusión de que en nuestra cultura había dos modelos de mujer que a mí misma me metieron en la cabeza en el colegio de monjas: la mujer santa, como la virgen María; y la mujer puta, como María Magdalena. La identidad de la mujer siempre se ha construido en torno a su cuerpo y al uso que ella hace de su cuerpo. Con Evelyn, por primera vez se aborda el asunto de la trata, que es el tercer negocio más lucrativo del mundo, después del tráfico de drogas y de armas. Y lo más duro es que las víctimas no pueden hablar porque bastante tienen con sobrevivir. Es necesario que se hable de ello y exista más información”.

A estas alturas solicito un segundo descafeinado, caliente, para entrar en tema de debate, la regularización de la prostitución… Isabel lo tiene claro, al principio era favorable porque pensaba que era una forma de acabar con las mafias, pero ha cambiado de opinión:

- “Lo que verdaderamente se necesita es un cambio de mentalidad, no de legislación. Lo importante es tener información veraz, no contaminada. Es increíble la cantidad de dinero legal que mueve la prostitución, porque aquí lo que hay son empresarios de hostelería que alquilan habitaciones, por el dinero que la chica logra de sus clientes. Pero es que en esos macroburdeles se les cobra por todo, por comprar la ropa, por medicinas, por peluquería…, a precios desorbitados. Pero además el empresario convence a las chicas para que se operen con lo que se lucra el médico y hasta el taxista que las trae y lleva a las consultas. Mire, en Alemania se legalizó la prostitución hace diez años y sólo se han dado de alta un 3 por ciento de mujeres porque no interesa que eso conste en tu vida laboral. Porque es una anomalía ganarse la vida acostándose diariamente con quince hombres. La prostitución provoca destrozos físicos y emocionales. Eso lo cuenta muy bien Marta Elisa de León, una exprostituta libre en su libro Las ocultas.”

Isabel pide entonces un zumo de naranja natural, que por la cara que pone es de las naranjas que van directamente a las papilas gustativas. Y sigue explicando cual es la solución para acabar con la prostitución. Una solución nada sencilla:

- “Es un problema cultural y de clase. El 90 por ciento de las prostitutas provienen del Tercer Mundo. Es necesario un cambio de mentalidad que debe empezar por jueces, abogados y policía”.

CIMA

Al tercer sorbo del zumo, Isabel me cuenta que CIMA es un proyecto muy interesante a través del cual, poco a poco, se fomenta la presencia equitativa de la mujer en el medio audiovisual. Y se pone como ejemplo: “Si no hubiera existido CIMA, yo no podría haber realizado Evelyn. Es a través del asociacionismo, de la participación, como la democracia se desarrolla y consolida, porque democracia no es sólo votar cada cuatro años. Es a través de la participación como se puede cambiar el mundo. Yo me siento idealista, tengo esa idea romántica de cambiar el mundo. CIMA, junto a la Academia de Cine es interlocutor en la Comisión del Ministerio de Cultura. Esto es muy importante porque nuestra voz está ahí”.

Y explica los datos. Entre 2000 y 2006, sólo un 7 por ciento de mujeres eran directoras; un 15 por ciento eran guionistas; y un 20 por ciento, productoras. Obviamente, esto influye en los contenidos.

Y ya, cuando el zumo de naranja hace que le caigan lagrimones me cuenta sobre la crisis. O quizá, los lagrimones son por la crisis, que naturalmente ha influido, “pero la pasión no ha disminuido”. Por ello, a pesar de las dificultades tienen dos proyectos gigantescos: la Red Iberoamericana de Mujeres (MICA) y la red europea (EWA) “para trasladar nuestros objetivos a Europa e Hispanoamérica para generar trabajo. Se trata de aunar esfuerzos y provocar que nos conozcamos para llevar a cabo proyectos cinematográficos. Vamos a crear la primera base de datos de cine dirigido por mujeres en español. Pero bueno…, la crisis afecta a todos. No entendemos la subida del IVA al cine y no a los toros o al fútbol. Las gentes de las artes escénicas estamos muy enfadadas. Aunque la cultura sea entretenimiento, no se puede confundir entretenimiento con cultura”.

Entre descafeinado y zumo de naranja, tiempo para una risa.

Trabajo, estudio, fracaso y éxito

Es salmantina militante y, según su twitter (@IsabeldeO), “cineasta pasional”. Comenzó a trabajar como locutora, a los 17 años, en la Cadena Ser de Salamanca. Al tiempo comenzaba los estudios universitarios en la Universidad Complutense de Madrid. Luego pasó a Onda Cero, también en su ciudad. Un tiempo bastante estresante, “si trabajar y estudiar es difícil, estudiar en una ciudad y trabajar en otra lo es mucho más”.
También trabajó como redactora creativa en una empresa de publicidad, lo que contribuyó a que antes de llegar al cine se hiciera “un buen mapa de lo que es el mundo de la comunicación”.
Y por fin pudo dedicarse al cine, que es lo que siempre había querido desde los 14 años. Al finalizar en la Universidad sus estudios de cine comenzó su peregrinar como meritoria de dirección, después como auxiliar, después como ayudante de dirección…, hasta que se estableció como script, o sea, continuista, la persona que se encarga de la lógica de la película entre plano y plano. Vamos, que no salga una botella de agua llena en un plano, en el siguiente vacía y en el siguiente otra vez llena. Así anduvo diez años al tiempo que hacía cortos. Entre ahorros y préstamos firmó cuatro cortos. El primero un absoluto fracaso, el último el éxito absoluto con un Goya y más de cincuenta y cinco premios. Contundente, reconoce: “Tan valiosos son los éxitos como los fracasos. Se aprende muchísimo de los dos”.
Ahora acaba de presentar su primer largo, Evelyn, y ha sido elegida presidenta de CIMA (Asociación de Mujeres Cineastas y Medios Audivisuales).

PARA SABER MÁS:


Y aquí puedes ver Miente:



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