Menos banderas y más Cibeles. |
Soy
madrileño de largo. Hijo y nieto de madrileños y como tal el domingo tengo una
gran responsabilidad. Esperanza Aguirre no puede gobernar en Madrid. Es
inexplicable que sea legalmente candidata de nada, es increíble que saque un
solo voto y sería vergonzoso que volviera a gobernar. Nunca entendí a los
italianos cuando votaban a Berlusconi hasta que he visto a Esperanza Aguirre y
al PP, concretamente valenciano y madrileño.
Desde
que nació este humilde blog he intentado ser pedagógico a la hora de explicar
que Esperanza Aguirre es una golpista como todos los que vivimos el tamayazo
sabemos. E intentado explicar que es mala gente, como sabe cualquiera que haya
estado con ella enfrente o al lado. Muchos de los que han estado a su lado,
ahora están imputados o en la cárcel. Más de veinte personas de su plena
confianza están imputados o en la cárcel.
Esperanza
Aguirre injuria, calumnia, ofende, ultraja, hiere, daña por doquier pero es
impune. Se salta la ley cuando le da la gana. Si tiene un problema con Hacienda
llama al ministro de turno. Esperanza Aguirre es el franquista “usted no sabe
con quien está hablando” llevado a la enésima potencia. Esperanza Aguirre
ingresa un cheque de cinco millones y después se fuma un puro afirmando que no
puede pagar la calefacción de su palacio. A Esperanza Aguirre le pagan los
cientos de favores realizados con un salario de 369.000 euros por no ir a
trabajar y “ a quien le pique que se rasque”. Esperanza Aguirre cobra favores a
través del ABC percibiendo entre 2.000 y 3.000 euros por artículos de
novecientas palabras. El periódico de derechas, además le dio un premio de
5.000 euros por un artículo taurino.
Esperanza
Aguirre es una víbora, es el cáncer de la democracia. Es odiosa, execrable,
detestable, abominable, despreciable, repelente. Es un Maquiavelo maloliente,
pestilente, hediondo, nauseabundo. Lleva adelante estrategias espurias, falsas,
contaminadas. Es engreída, fatua, petulante.
Lógicamente
esas formas de marquesa guerrillera tiene su público. Es la lideresa. Yo no soy
de líderes ni de lideresas, pero este país aborregado; esta ciudad, Madrid, que
ha ido perdiendo la dignidad día a día, ultrajada y humillada desde que la
izquierda inauguró el cainismo, ha perdido el color, la vida, la alegría y
después del horror tiende al espanto.
Esta
ciudad, mi ciudad, la de mis padres y abuelos no puede ser rematada y violada
por las el desprecio y la enajenación de Esperanza Aguirre.
Tengo
la impresión de que en Madrid capital gentes de izquierdas van a votar contra
gentes de izquierdas para regocijo de los de siempre. De ello hablaremos a
partir del lunes. Y aquí, independientemente de cualquier asunto, lo que no
puede ser es votar a Esperanza Aguirre. No puede ser. La pesadilla no puede
ser.
P.S.
Pediría al nuevo Gobierno municipal que retire las banderas que rodean la
Cibeles, que no se ve bien a la diosa del foro. Que retorne la fuente al
original. Menos banderas y más Cibeles.
No hay comentarios :
Publicar un comentario